El año pasado visité el Reino Hachemita de Jordania, mi primera visita a un País de Asia ¡ Una experiencia única! Pero tengo inercia viajera al subcontinente austral de América ¡Sudamérica me encana!
Y este año me he decantado y dejado encantar por Bolivia, que todavía resulta un país en estado casi natural –mucho menos visitado que sus vecinos–, es la nación más indígena de Latinoamérica y una de las más desconcertantes: conserva su originalidad y una riqueza cultural, histórica y espiritual asombrosas. Aquí sobreviven todavía culturas amenazadas e idiomas que podrían desaparecer en las próximas décadas.
Bolivia sigue sin ser un país trillado por el turismo por lo que es un lugar perfecto para visitar y vivir una experiencia auténtica. Este Tíbet americano es el país más aislado y a mayor altitud del hemisferio Sur lo que ha ayudado a que sea el país de Sudamérica que más tradiciones conserva en su cultura a través de la población indígena y mestiza.
Un país, sin salida al mar, que limita al norte y al oriente con Brasil, al sur con Paraguay y Argentina, y al occidente con Chile. Pero que tiene el 46 % de toda la diversidad biológica del mundo, con ecosistemas que van de la Amazonía a los Andes.
Con el doble de extensión que España, pero con una cuarta parte de población. Y lógicamente, el tiempo con el que uno cuenta, limita y hace que tengas que ajustarle para poder disfrutar todo lo posible del país que visitas. Imposible ver todas las zonas de este país con la limitación de tiempo que cuento, ¡menos de 15 días!
El país está dividido en: – 9 departamentos, – 112 provincias, – 314 secciones de provincias y – 1,384 cantones.
Un viaje para conocer las maravillas de este país andino, pero limitado y centrado en visitar el Altiplano Boliviano o Región Andina, que abarca el 28% del territorio nacional. Desde el Lago Titicaca, al norte con la frontera de Perú, hasta el rincón más suroccidental de Bolivia a los pies del volcán Licancabur, celoso guardián que custodia la Laguna Verde en la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Abaroa, que hace frontera con Chile.
Sus otras dos regiones son: La Subandina en el centro-sur (Valle), región intermedia entre el altiplano y los llanos orientales que abarca el 13 % del territorio, y comprende los valles y los yungas. Y la Región de los Llanos en el noreste que se ubica al norte de la cordillera Oriental o Real y se extiende desde el pie de los Andes hacia el río Paraguay. Es una tierra de llanuras y bajas mesetas, cubierta por extensas selvas ricas en flora y fauna. Abarca el 59 % de la superficie nacional.La zona que visitaré forma parte de la extensa meseta del Altiplano Andino, una gran planicie de altura o altiplano de América del Sur ubicada a una altitud media de 3800 msnm que abarca parte del noroeste de Argentina, el occidente de Bolivia, parte del norte de Chile y parte del sur del Perú. Representa la segunda zona mesetaria más grande del mundo, sólo superada en extensión por la tibetana. Tiene importancia histórica por haber sido el lugar en que surgieron diversas civilizaciones, como la cultura Tiahuanaco, y se realizó la domesticación de plantas como la papa y animales como la llama y la alpaca. Por sus características ambientales y ecológicas, es una región natural única en el continente y por su altitud pertenece a la llamada región de la Puna, que en lengua nativa quechua y significa 'región de altura'.